Por Javier Bava.
Volvimos a viajar al
Tigre con Matías, para entrevistar esta vez a una gloria de Defensores de
Belgrano, que vistiera sus colores a fines de la década de 1950 y principios de
1960. Embargados de emoción, fuimos recibidos por el crack y su familia (a los que se sumó luego Ernesto Camino, vecino
de la zona), y conversamos largamente.
Reinaldo José
Borlenghi llegó a Defensores de Belgrano en 1958, proveniente de las filas de
Acassuso, donde integraba la línea media, junto a Eduardo Mónaco, para cubrir
el puesto de centrehalf, que ocupara en la temporada 1957, Pedro Dziegul
(junto a José Villar y Rodolfo Chiti).
Defensores había
estado cerca del ascenso en la temporada anterior, y se reforzó convenientemente
para lograr el complicado torneo de Primera "C", donde debió competir
en una lucha vibrante, con Argentino de Quilmes.
A pesar de no haberlo
visto en la cancha, no fue difícil reconocer el perfil de jugador de Borlenghi.
Según el mismo refiere “siempre jugó de centrehalf” (algo así como el
patrón del medio de la cancha) y según la opinión de Ernesto Camino (recordado
zaguero en los años 60 y 70, que seguía a Defensores en su juventud), “era el
Mascherano de Defensores”, lo que indica de alguna manera cual era su
temperamento y su forma de jugar. “Siempre dejè todo en la cancha”, nos dice
Borlenghi, quien explicó detalladamente la forma de jugar de aquella famosa
línea media que formaba junto a Mónaco y Chiti, y la ubicación de cada uno de
sus componentes, a la hora de atacar y de defender.
Debutó en Defensores
el 5/4/1958, en Núñez, en el encuentro por la 1ª fecha del Torneo de Segunda de
Ascenso (hoy Primera División “C”), en el cual el local derrotó a su similar de
Liniers por 5 a 1, con 4 goles de Luis Ojeda y el restante de Pedro Dziegul.
Entrenando en el Pasquale. Borlenghi entre Mónaco y Chiti.
Jugaron esa tarde por
Defensores, dirigido técnicamente por Ricardo José Gregorio “Nito” Chané, Héctor Dusio; Herminio Verna y Esteban Lebán;
Pedro Dziegul, Reinaldo José Borlenghi y Rodolfo César Chiti; José Néstor Vitaldi,
Luis Francisco Ojeda, Matías Cardozo, Audinio Padrón e Ramón Angel Hidalgo.
Según nos comenta
Borlenghi, por ese entonces, “Nito” Chane (prestigioso DT), daba antes de cada
partido una breve explicación sobre la táctica a emplear: “Ustedes saben lo que
tienen que hacer” les decía, y agregaba “un beso a cada uno de sus jugadores”.
Es de suponer que cada uno de estos últimos obedecían lo entrenado en la
semana, ya que conformaron el equipo más productivo de la historia de Defensores.
Participó del primer
equipo defensorista en 91 oportunidades, entre las temporadas de 1958 y 1960, luego
de las cuales, partió para incorporarse a Platense, equipo contra el cual
vistió por última vez la casaca roja y negra, más precisamente por la última
fecha del Torneo de Primera "B" de 1960, el 4/12/1960.
Borlenghi arriba junto a Chiti y Mónaco.
Se jugó ese encuentro
en el “Juan Pasquale” y ganó el local (que perdía 1 a 0, con gol de David
Carmelo Iñigo) 3 a 1, con goles de Guillermo Linares, Luis Ojeda y Rodolfo
Villalba. Defensores formó esa tarde con Héctor Dusio; Herminio Verna y Osvaldo
Domínguez; Eduardo Mónaco, Reinaldo Borlenghi y Rodolfo Chiti; Rodolfo
Villalba, Guillermo Linares, Jorge Martín, Luis Francisco Ojeda y Ramón
Alegre.
Tras un breve pasó por
Platense, donde el DT, Angel Labruna pretendía “hacerlo jugar de una forma que
él no quería, muy diferente a aquella que desarrollaba en Defensores”, fue a
Talleres de Remedios de Escalada, para luego de un frustrado retorno a
Defensores, dejar la práctica activa del fútbol.
Conformó, junto a
Mónaco y Chiti, una línea media (diría Horacio Araujo, viejo hincha
defensorirsta, que en algún momento fue denominada por el periodismo como
"línea y media") muy reconocida por entonces, no sólo por aquellos
que seguían el fútbol de ascenso, sino por el público futbolero en general, que
la repetía “de memoria”. A diferencia de sus dos laderos, no se hizo presente
en las redes adversarias durante su paso por Defensores.
Teniendo en cuenta sus
cualidades futbolísticas, fueron varios los clubes de Primera que lo
pretendieron, entre ellos Argentinos Juniors. y Huracán, además de la posibilidad
de viajar a Colombia. Inclusive, en una oportunidad, los calamares, dispuestos
a formar un poderoso team quisieron
llevar a sus filas a los 3 jugadores de la línea media defensorista, por la que
estaban dispuestos a desembolsar un millón de pesos.
Seguramente, sintió
Defensores la partida de Borlenghi (reemplazado por el juvenil Abel Varas, proveniente
de las Inferiores de River), ya que en 1961, perdió la categoría, a la
que recién pudo regresar en 1964, tras una reestructuración.
Ernesto Camino y Reinaldo Borlenghi.
Nos despedimos de
Reinaldo Borlenghi y de su familia, como siempre, a la espera que sepa que
Defensores no se olvida de aquellos que vistieron sus colores, y con la
intención que él no se olvide de los colores que tan bien supo defender como
futbolista.